¿Pero no era que el Bazar estaba en una santa cruzada contra el reggaeton?. Si claro, pero Calle 13 es mucho más que reggaeton que no es más que una etiqueta que le puso la "disquera" para vender esta música que combina varios géneros y que la gente de Calle prefiere llamar "urbana" (no demasiado felizmente).
Bordeando a veces algunos deslices de mal gusto, a veces con una lirica misogina, pero siempre con un toque rebelde que ahce de las letras de Calle algo muy interesante de compartir. Lo chicos tiran y tiran contra todos: contra las discográficas, contra los cantantes de reggaeton (los llorones), contra la imagen del gringo latino, contra la pobreza, contra los medios, contra la estupidez, etc. Una buena cantidad de contras como para ser incluido en las Bateas del Bazar.
Además basta ver a la gente de Calle 13 comprometida en algo más que los artistas del pop. el último concierto de Calle, el cantante tenía escrito en la piel (¿hace falta una metáfora más directa?) una muy buena pregunta que no tiene la respuesta correcta: ¿Dónde está Luciano Arruga?
Dice la nota del blog Ao passarinho (de donde tomamos el link) que En su nueva producción discográfica, “Los de atrás vienen conmigo”, Calle 13 no decepciona: los artistas plantan una vez más la bandera de la creatividad, del atrevimiento y del desafío como tan sólo ellos saben hacer. Y se acompañan de grandes figuras de la música popular latina: Rubén Blades; el cantautor y músico colombiano Juanes; y el que muchos consideran es el grupo de rock supremo en español, Café Tacvba. En el mundo, dice Calle 13, hay mentiras y falsedades, hechos, verdades y casualidades. Pero nada, nada hay, podría decirse, como las composiciones de este disco de 16 cortes, que incluyen introducción, interludios, 12 temas originales y conclusión. Incluso el mundo del reggaetón, en el que más de una vez se ha ubicado –erróneamente– a Calle 13, también es fustigado por el dúo ante la hipocresía que Residente y Visitante consideran predomina en el género. “Cada tema tiene una dirección. Es como una película. Nunca eliminamos temas. Lo que le digo a todo el mundo es que, esto no es como una fábrica de bombones, en la que hicimos 25 amarillos y quitamos dos”. El proceso creativo de “Los de atrás vienen conmigo” desembocó en nuevas influencias musicales que atraían a esta pareja de colaboradores. Ritmos de diversos rincones del mundo aparecen de manera insospechada dentro del universo urbano de Calle 13. “Se tomaron elementos de otros lugares, como la música de la región de los Balcanes y el candombe de Sudamérica. Es un ritmo afro que abarca a toda Latinoamérica”. Latinoamérica y mucho más ha abarcado Calle 13 durante su corta trayectoria, en la cual sus integrantes se han llevado cinco premios Latin Grammy.
Bordeando a veces algunos deslices de mal gusto, a veces con una lirica misogina, pero siempre con un toque rebelde que ahce de las letras de Calle algo muy interesante de compartir. Lo chicos tiran y tiran contra todos: contra las discográficas, contra los cantantes de reggaeton (los llorones), contra la imagen del gringo latino, contra la pobreza, contra los medios, contra la estupidez, etc. Una buena cantidad de contras como para ser incluido en las Bateas del Bazar.
Además basta ver a la gente de Calle 13 comprometida en algo más que los artistas del pop. el último concierto de Calle, el cantante tenía escrito en la piel (¿hace falta una metáfora más directa?) una muy buena pregunta que no tiene la respuesta correcta: ¿Dónde está Luciano Arruga?
Dice la nota del blog Ao passarinho (de donde tomamos el link) que En su nueva producción discográfica, “Los de atrás vienen conmigo”, Calle 13 no decepciona: los artistas plantan una vez más la bandera de la creatividad, del atrevimiento y del desafío como tan sólo ellos saben hacer. Y se acompañan de grandes figuras de la música popular latina: Rubén Blades; el cantautor y músico colombiano Juanes; y el que muchos consideran es el grupo de rock supremo en español, Café Tacvba. En el mundo, dice Calle 13, hay mentiras y falsedades, hechos, verdades y casualidades. Pero nada, nada hay, podría decirse, como las composiciones de este disco de 16 cortes, que incluyen introducción, interludios, 12 temas originales y conclusión. Incluso el mundo del reggaetón, en el que más de una vez se ha ubicado –erróneamente– a Calle 13, también es fustigado por el dúo ante la hipocresía que Residente y Visitante consideran predomina en el género. “Cada tema tiene una dirección. Es como una película. Nunca eliminamos temas. Lo que le digo a todo el mundo es que, esto no es como una fábrica de bombones, en la que hicimos 25 amarillos y quitamos dos”. El proceso creativo de “Los de atrás vienen conmigo” desembocó en nuevas influencias musicales que atraían a esta pareja de colaboradores. Ritmos de diversos rincones del mundo aparecen de manera insospechada dentro del universo urbano de Calle 13. “Se tomaron elementos de otros lugares, como la música de la región de los Balcanes y el candombe de Sudamérica. Es un ritmo afro que abarca a toda Latinoamérica”. Latinoamérica y mucho más ha abarcado Calle 13 durante su corta trayectoria, en la cual sus integrantes se han llevado cinco premios Latin Grammy.
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